25 de abril de 2011

¿Mi diario infinito se colapsa?

Un, dos, tres... vuélvete del revés.
Cuatro, cinco, seis... camina sin red.
Siete, ocho, nueve... resguárdate de la nieve.
Diez, once, doce... olvídate de los roces.
Trece, catorce, quince... arrójate a la linde,
dieciséis, diecisiete, dieciocho... del bosque oscuro y peligroso.
Diecinueve, veinte, veintiuno... 
This is the story of my life... And again, and again, and again... Press repeat to continue with the routine, please.
Don't give up.
That's easy to say.
Infinito...
Sentirse abandonado en medio de la multitud, descubrir un tesoro escondido tropezándote con él, subir a la tercera planta y bajar al sótano, contradecir una verdad irrefutable, mentirte a ti mismo diciéndote una verdad. Tengo un diario en el que guardo la evolución de mis sentidos, en el que mi persona varía con el tiempo, es como una copia de mi propio yo. Cada cierto tiempo lo hojeo para recordarme a mí misma; es como un diario con memoria ilimitada, pero sin el como.
Muchas veces no recuerdo haber guardado esas caras, y me descubro sorprendida asimilando que de verdad fui yo la que se atrevió a escribir esas cosas, algunas parcas y austeras, y otras decoradas excesivamente, pero todas verdad y sin malas segundas intenciones. Pero últimamente dejo demasiados recuerdos en la bandeja de entrada y a pesar de enviar alguno, con bastante frecuencia, a la entrada, se siguen acumulando y la marca naranja de borrador empieza a colapsarme. Sólo espero que esto no signifique un nuevo abandono.
Ciertamente: me niego a ello.

3 comentarios:

  1. No quiero que esas pompas exploten... si lo hacen no sé de lo que seré capaz, ni qué será de mis pompas.

    ResponderEliminar
  2. Creo que yo también tengo un diario de esos... y no es de hipócrita.
    El mundo se equivoca.

    ResponderEliminar
  3. Yo también me niego en rotundo >o< No puedes dejar de escribir todo lo que se te pasa por la cabeza, da igual que se queden como borradores. Si no lo haces, morirás Ò.Ó

    ResponderEliminar

¡Comenta! Mi blog tiene mucha hambre y ¡sólo se alimenta de comentarios!