26 de febrero de 2010

¿Seguro?

Bien... mi aliento se atraganta en mi esófago, mis lágrimas se atascan en mis pestañas y el melancólico ritmo de la música me hace perder la conciencia... Alguien me llama desde las profundidades y me pide que no caiga esa noche, que respire el aire que tengo a mi alrededor. -¿Por qué? -Porque ya queda menos, porque el tiempo se agota, y pronto estaré ahí. -No puedo... -Aguanta... por favor... La desesperada petición no sirve de nada y yo sigo cayendo en mi inconsciencia. La música cambia de ritmo, la canción terminó, pero eso no me impide nada. -Por favor... no te vayas, no me dejes sólo en este mundo gris, no sin ti, no sin tus pequeñas imperfecciones... -No soy yo la que se va, eres tú. -No. -Sí. -No. Yo no caigo en la inconsciencia, en el olvido, ni quiero caer si no es contigo. -Pues vente. ... -Vente. -No, vente tú. ¿Por qué quieres caer?, levántate conmigo y escapa de ese indebido sufrimiento. -No puedo, me absorbe... y me absorbe... cual esponja con el agua. -Pues estruja la esponja y haz que el agua caiga y desaparezca, hazlo, por favor... -¿Estás seguro de que eso es lo que quieres? -Sí. -No puedo... -¿Por qué? -Está bien, lo intentaré, pero costará. -¿Por qué? -... Yo soy el agua... Silencio, ya no existe ni un ápice de sensaciones en aquél recóndito lugar, ya no se puede sentir la presencia de un alma, ya ni siquiera se puede respirar el dulce aroma de un cuello con el pelo apartado a un lado, o el dulce aroma de su piel contra la blanca sábana de mi cama. Ya no está, y yo he hecho que se vaya... ¿por qué? Hecho de menos su calor, su risa entre sus dientes, sus leves susurros de melancolía... Ya no existen ni si quiera gritos ahogados de dolor en una boca cerrada por el amor, ni siquiera el odio hacia lo ambiguo, ni siquiera... da igual ya no existe... Ahora espero a que aparezca otra voz en mi cabeza que pueda sustituir a aquella que tanto placer me produjo pero que yo eché de mi vida con un leve soplido. Ahora quiero que esa nueva voz haga que todo desaparezca de la oscuridad y me quede sólo con ella, porque soy como una telaraña, porque no quiero que escapen hasta que yo las devore.

6 comentarios:

  1. Eran borradores, más que nada, porque el blog se come los espacios y no me salía como yo quería u_u Y no pasó nada, era un cacho de una canción de Three Days Grace, creo, y llegó la inspiración divina xDD

    Yo me imagino tu abrazo, o lo recuerdo. Hace menos de una hora me has dado el último.

    Te quiero ♥

    ResponderEliminar
  2. trankiiii k ya as sustituio a la voz k as perdio

    ResponderEliminar
  3. Mmm..., no sé si llamarte, porque no quiero llorar hoy. Llevo todo el día sin llorar y quiero terminarlo así, aunque creo que no va por buen camino.

    Si lees esto conéctate y te cuento o lo que sea, porque... Bueno, no sé, ya me desahogaré cuando hablemos Pan.

    Te quiero.

    ResponderEliminar
  4. Lo necesito T_T Y música, y libros, y trípode, y esta vez SÍ VAMOS TEMPRANO T_T

    Quiero quedarme a dormir en tu casa T_T y morir de sobredosis de chocolate con la garganta casi desintegrada de hablar durante toda la noche T_T (he puesto muchos ''T_T'' T_T)

    ResponderEliminar

¡Comenta! Mi blog tiene mucha hambre y ¡sólo se alimenta de comentarios!